Beyer M, Bischoff C, Lässing J, Gockel I, Falz R. Effects of postoperative physical exercise rehabilitation on cardiorespiratory fitness, functional capacity and quality of life in patients with colorectal, breast, and prostate cancer – a systematic review and meta-analysis. J Cancer Res Clin Oncol. 2024 Dec 24;151(1):13. doi: 10.1007/s00432-024-06064-y.
La cirugía es un pilar fundamental en el tratamiento del cáncer de mama, próstata y colon. Sin embargo, las secuelas físicas postquirúrgicas, como la reducción de la capacidad cardiorrespiratoria (CRF), la fatiga y la pérdida de funcionalidad, pueden impactar significativamente en la calidad de vida de los pacientes.
¿Por qué es importante el ejercicio?
La CRF, medida a través del consumo máximo de oxígeno (VO2max) y la distancia recorrida en seis minutos (6MWD), es un indicador clave de salud y supervivencia en pacientes oncológicos. Tras una cirugía, la capacidad física disminuye, lo que aumenta el riesgo de complicaciones, morbilidad y mortalidad. Este metaanálisis evaluó cómo los programas de ejercicio combinados (aeróbicos y de fuerza) mejoran no solo la CRF, sino también la funcionalidad, la calidad de vida y reducen la fatiga asociada al cáncer.
El análisis incluyó 10 ensayos clínicos controlados y aleatorizados con un total de 1,298 pacientes. Los resultados fueron claros:
- Mejoras en la capacidad cardiorrespiratoria:
Los pacientes que participaron en programas de ejercicio mostraron un aumento significativo del VO2max (1.46 ml/kg/min en promedio) en comparación con aquellos que recibieron cuidados estándar.
- Mayor funcionalidad:
Los participantes incrementaron la distancia caminada en el test de seis minutos en 63.47 metros más que los controles, lo que refleja una mejora sustancial en su capacidad funcional diaria.
- Impacto en la calidad de vida:
El ejercicio mejoró la calidad de vida de los pacientes según diversas métricas, incluyendo menor fatiga y una mejor percepción general de bienestar.
Estos resultados subrayan la importancia de incluir programas de ejercicio supervisado en la rehabilitación postquirúrgica de pacientes con cáncer. Los beneficios no se limitan a la recuperación física, sino que también abarcan el ámbito psicológico y social, proporcionando herramientas para afrontar el día a día con mayor autonomía y confianza.
Para los oncólogos, esta evidencia respalda la implementación de protocolos de ejercicio como parte del tratamiento integral del cáncer. Para los fisioterapeutas, representa una oportunidad de ofrecer intervenciones específicas y adaptadas a las necesidades de cada paciente. Y para los pacientes, es una invitación a considerar la actividad física como un aliado clave en su proceso de recuperación.
Conclusión
El ejercicio terapéutico no es solo una opción complementaria, sino una intervención esencial en la rehabilitación oncológica. Desde nuestra experiencia en OYTU, abogamos por programas personalizados que empoderen al paciente en cada etapa de su recuperación, demostrando que, con el enfoque adecuado, el ejercicio puede ser parte integral de la lucha contra el cáncer.