En Clínica OYTU sabemos que el diagnóstico de cáncer viene acompañado de un camino lleno de dudas, miedos y tratamientos que pueden resultar muy duros. Una de las preguntas más frecuentes de nuestros pacientes es: “¿Puedo hacer ejercicio durante la quimioterapia o la radioterapia?”. La respuesta es clara: no solo puedes, sino que deberías hacerlo desde el primer día.
La evidencia científica de los últimos 15 años es contundente: el ejercicio físico supervisado en pacientes oncológicos es seguro y altamente beneficioso. Numerosos estudios han demostrado que ayuda a:
- Reducir la fatiga relacionada con el cáncer, uno de los efectos secundarios más incapacitantes.
- Mantener la masa muscular y la fuerza, previniendo la sarcopenia y la pérdida de autonomía.
- Disminuir el riesgo de linfedema tras cirugías de mama u otras intervenciones.
- Mejorar la salud cardiovascular y metabólica, reduciendo el impacto de los tratamientos en corazón y metabolismo.
- Favorecer el estado de ánimo, reduciendo ansiedad y depresión.
- Aumentar la eficacia de los tratamientos oncológicos y mejorar la tolerancia a la quimioterapia.
El ejercicio debe ser siempre personalizado. No todos los pacientes tienen las mismas necesidades: algunos requieren más trabajo de fuerza, otros un enfoque en la resistencia aeróbica, y muchos necesitan fisioterapia especializada para tratar cicatrices, adherencias o limitaciones de movilidad. Por eso, en OYTU diseñamos planes individualizados, adaptados al momento del tratamiento, al estado físico y a los objetivos de cada persona.
La clave está en empezar pronto. Tal y como señalan guías internacionales como las de la American College of Sports Medicine (ACSM), los mayores beneficios se logran cuando el ejercicio se introduce desde el inicio del proceso oncológico, y no solo después de terminar los tratamientos.
En OYTU trabajamos con un equipo multidisciplinar que incluye fisioterapia oncológica, nutrición, ejercicio terapéutico, psicología y medicina del deporte. Nuestro objetivo es que cada paciente no solo supere el cáncer, sino que llegue al final del camino más fuerte, con más energía y con una mejor calidad de vida.
Porque hacer ejercicio durante el cáncer no es un lujo, es parte del tratamiento. (www.oytu.es)
